FESTIVAL: VIERNES 4
LA VIDA A LA ROCAS (Ficción)
Director: Pablo Zambrano.
Un joven roba unos kilos de cocaína a un tipo de negocios inmorales, donde conoce a una prostituta que en un principio, a cambio de sexo lo ayuda a escaparse con esta suma de sustancias alucinógenas. Buena presentación, una calidad cinematográfica de gran nivel. Buen orden de ideas. EFR.
(NOTA: 6,6)
SU–VIDA AL CIELO (Animación)
Director: Víctor Santander.
Animación en Stop-motion. Genial utilización de los personajes y de la trama. Una precisa Banda sonora. Claro que no llega a ser Vivianne Barry, pero maneja bien ese tipo de animación. El final degrada un poco la intensidad. EFR.
(NOTA: 5,5)
ENCUENTRO (Ficción)
Director: Camilo Sánchez.
Con mucho respeto al director, el guión es muy pobre, le faltó trabajo y es demasiado mamón. Baja calidad de imágenes y degradante actuación. Una edición que falta mucho por aprender. Consejo al director: siga trabajando. EFR.
(NOTA: 2,0)
HUACHOS DE ALMA MATER (Documental)
Director: Leonel Jofré.
Un buen documental que cuenta la causa del decaimiento de la Universidad José Santos Ossa y el esfuerzo de los jóvenes estudiantes por mantener vivo el espíritu universitario y el futuro humanista. Muy emotivo. Se destaca la gran edición del proyecto. EFR.
(NOTA: 6,8)
USB BOY (Ficción)
Director: Mario Zapata.
Un pobre guión (si es que tenía guión). Muy predecible, se sabía que el joven podía introducir un cable en algún lugar de su cuerpo. Lo único bueno de este cortometraje son los efectos digitales. Mala actuación. EFR.
(NOTA: 3,7)
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MUESTRA DE CINE “MADE IN LATINOAMERICA”
LOS INUNDADOS
Argentina, 1961, 87 min.
Dirección: Fernando Birri.
Elenco: Pirucho Gómez, Lola Palombo, María Vera, Roberto Pérez.
(NOTA: 5,8)
Los Inundados narra la historia de una familia que habita al sur de Santa Fe y es forzada a mudarse a un vagón de ferrocarril abandonado al inundarse la localidad en donde vive. De ahí el nombre del film.
Basado en un relato de Mateo Booz, Birri confecciona esta obra popular, llena de personajes pintorescos y, por supuesto, bastante realista. Es un film muy natural, con situaciones graciosas y demasiado humano en su relato, esto se demuestra en la vigencia que tiene la historia- basta con ver las noticias de familias y localidades que se inundan completamente-. La pequeña falla técnica (un desfase de sonido) no opacó para nada la visualización de la película que nunca llegó a ser latera ni repetitiva. Muy recomendable y es, sin duda, una de las piezas sólidas que mostró este festival. PFR.
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MUESTRA DE CINE INTERNACIONAL Y NACIONAL
MAROA
Venezuela, 2005, 105 min.
Dirección: Solveig Hoogesteijn
Elenco: Tristán Ulloa, Yorlis Domínguez, Elba Escobar, Luke Grande.
(NOTA: 6,0)
Maroa es una niña de 11 años, audaz superviviente de la calle. El alimento cotidiano de Maroa son telenovelas cursis, changas y raps que interpretan al barrio, y por las noches, el chasquido de las balas, los disparos reflejados en las encuestas que cuantifican 130 muertos cada fin de semana en las barriadas de Caracas. Brígida, su abuela, adivinadora, tramposa y vendedora de lotería, la maltrata y le exige rendición exacta de las cuentas, pero es su única familia. Impetuosa y decidida, la vida de Maroa no tiene futuro hasta el momento que escucha un clarinete. La conexión es mágica y profunda. Los días de Maroa giran en torno a las clases de música que imparte Joaquín, hombre tímido e incondicional que se interesa de inmediato por esta niña talentosa, carente de la más elemental disciplina. Joaquín, el único que siembra esperanza en su abandono, descubre que a través de Maroa, su mundo cambiará para siempre.
La película se mueve en un ambiente marginal (algo malgastado en el cine latinoamericano hoy en día), con gotas de humor negro y sarcasmo. La pequeña Maroa, quien se fascina con Mozart y todo su arte, descubre en Joaquín, su profesor de clarinete del hogar al cual llega por problemas delictuales, todo el cariño, afecto y amor que quizás necesita para sobrevivir la dura tarea de vivir en sus condiciones. De ritmo entretenido y por sobre todo reflexiva, uno de los grandes aciertos latinoamericanos del Festival. WVW.
WHAT THE BLEEP DO WE KNOW?
Estados Unidos, 2005, 110 min.
Dirección: William Arntz, Betsy Chasse, Mark Vicente.
Elenco: Marlee Matlin, Barry Newman, Elaine Hendrix, Armin Shimerman.
(NOTA: 7,0)
Este drama-documental, narra la historia de Amanda, una fotógrafa divorciada inmersa en una experiencia parecida a la de “Alicia en el País de las Maravillas”, cuya vida comienza a sufrir cambios sorprendentes que le harán cuestionarse aspectos relevantes de su vida.
Es una película parte documental, parte historia, con partes de efectos especiales y animaciones elaboradas. Preguntas como ¿qué es la realidad?, ¿qué estamos haciendo aquí?, ¿podemos afectar, por medio de nuestra mente, la realidad?, ¿cómo podemos determinar que el mundo en el que estamos es real, si quien lo dirige es un ser intangible?, y otras más de este tipo, son respondidas desde un enfoque filosófico basados en la física cuántica, cuyo objetivo es formular que teniendo el control de uno mismo, se tiene el control del cuerpo y del ambiente alrededor.
El film cuestiona conocimientos y paradigmas en base a recientes evidencias científicas que traen abajo conceptos importantes como son la materia y el tiempo. Significativo es también la redefinición que hace la película sobre Dios, hecho no menos polémico para nuestra sociedad. Excelente película. Una verdadera joyita de este Festival. Imperdible. PFR.
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