lunes, 27 de julio de 2009

MIS MUJERES DE PELÍCULA: MONICA BELLUCCI

Película: "Irreversible" (Irréversible).
Dirección: Gaspar Noé.
Elenco: Vincent Cassel, Albert Dupontel, Philippe Nahon, Stéphane Drouot, Mourad Khima.
Vista en: Febrero de 2003, en la Casa de la Cultura Antofagasta.

En realidad, no recuerdo exactamente cuando fue la primera vez que vi a Monica Bellucci actuar en una película, seguramente debe haber sido como una de las infartantes vampiresas de “Drácula” en la adaptación de Ford Coppola; pero decidí elegir “Irreversible” por todo lo que representa el film: la novedosa forma de narrar la historia, la crudeza de algunas imágenes, la forma y estética de las escenas y el concepto final que engloba al tiempo como protagonista -y antagonista- principal.

En aquellos años, una amiga me había invitado a asistir a un ciclo de cine que estaba realizando junto a unas compañeras de universidad en la Casa de la Cultura de Antofagasta (en realidad era un círculo de artes que habían formado llamado “Untertruck”) e iban a presentar tres películas seguidas en una sola sesión; entre ellas, estaba “Irreversible”. La cinta narra los sucesos anteriores y posteriores a la violación de una mujer llamada Alex (Bellucci), así como también de la frenética y desesperada sed de venganza de su novio Marcus (Cassel) en compañía de su amigo Pierre (Dupontel). Sin lugar a dudas, el film había dado que hablar desde el momento de su estreno, catalogada como una cinta polémica y enfermiza por parte de la crítica especializada, sobre todo por una escena en particular: la violación explícita de diez minutos que sufre el personaje de Monica.

Durante la exhibición del film, en uno de los salones principales de la Casa de la Cultura, veía como en esa escena particular, personas se daban vuelta o simplemente se retiraban del salón con cara de asco. Y no es para menos, todo el contexto y la atmósfera que crea Noe durante la primera parte de la película es realmente nauseabundo. Pero dejando de lado aquella terrible escena, en todos los minutos que aparece Monica en pantalla sale despampanante y glamorosa, con ese vestido sugerente que maliciosamente juega entre la realidad y la imaginación. Sin exageraciones, no creo que haya escena alguna donde no se robe la pantalla con esa figura voluptuosa y exquisitamente italiana que la caracteriza; y para que hablar de su delicada belleza que irradia y deja sin palabras a quien la mire. Todo esto, hace comprender perfectamente el personaje de Albert Dupontel y de sentirse reflejado en él; y por otro lado, envidiar por completo a Vincent Cassel, porque en la película y en la vida real es su bendita pareja.

Creo que mi parte favorita del film es cuando Alex y Marcus están en la casa, hacen el amor y se preparan para ir a la fiesta. No es mi favorita por el desnudo (aunque obviamente se agradece), sino por la tranquilidad y pasividad que presentan los personajes; ese apasionamiento y enamoramiento que tienen los lleva a una felicidad absoluta y se traspasa al espectador. Para mí durante esas escenas es donde Monica se ve más hermosa en todo el film.

El final de la cinta me parece triste y bello a la vez, reflejando una especie de torbellino desde donde comienza todo, donde los sueños y satisfacciones parecen ir en una dirección, pero nosotros como espectadores, sabemos que van hacia un punto completamente distinto... donde deseamos que Monica no tenga que pasar por todo lo que viene y desde donde me gustaría perderme completamente en ella.


Para mi amigo Yang Lau, porque sé que es una de sus musas abnegadas.




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